D020 Comprender la verdad del acoso y la agresión sexual en la Iglesia Episcopal
Se resuelve, con la aprobación de la Cámara de ________________,
Que la 79ª Convención General designe un grupo de trabajo para desarrollar una encuesta sobre la discriminación, el acoso y la violencia de género contra las mujeres y las niñas en todas sus formas, tal como entendemos estos pecados, que incluyen, entre otros, el acoso sexual y de género, la agresión sexual, el comportamiento físico, espiritual y emocionalmente abusivo, y la opresión basada en el género. Esta encuesta se basará en la encuesta utilizada para recopilar información y compilar el informe de 2017 "Sexual Misconduct in the United Methodist Church: US Update"; y sea además
Resuélvase, que el grupo de trabajo será nombrado conjuntamente por el Presidente de la Cámara de Diputados y la Obispa Presidenta, con 9 miembros - 3 laicos (al menos 2 de los cuales se identifican como mujeres), 3 sacerdotes o diáconos miembros (al menos 2 de los cuales se identifican como mujeres), y 3 obispos miembros (al menos 2 de los cuales se identifican como mujeres). La composición general de este grupo de trabajo incluirá al menos 5 miembros que hayan experimentado la discriminación, el acoso y la violencia de género contra las mujeres y las niñas y al menos 3 miembros que tengan experiencia personal y reciente trabajando con quejas dentro de la Iglesia en general y/o la comunidad secular en asuntos de discriminación, acoso y violencia de género contra las mujeres y las niñas. Este grupo de trabajo informará de sus progresos al Consejo Ejecutivo a intervalos regulares y oportunos, según lo determinen el grupo de trabajo, la Obispa Presidenta y el Presidente de la Cámara de Diputados; y además
Seresuelve que el grupo de trabajo creará dicha encuesta a más tardar en diciembre de 2019 y trabajará con las organizaciones de la Iglesia en general, las diócesis y los líderes de la Iglesia, tanto laicos como clérigos, para distribuirla ampliamente en la Iglesia Episcopal para que puedan acceder tanto los laicos como el clero a más tardar en la primavera de 2020, estando dicha encuesta disponible principalmente en línea, y con las adaptaciones que determine el grupo de trabajo para permitir las respuestas de aquellos miembros de la Iglesia en general que no tengan un acceso fácil y rápido a Internet; y se resuelve además
Seresuelve que el grupo de trabajo redacte un informe en el que se detallen las respuestas a la encuesta, un resumen de las mismas y las ideas y observaciones particulares del grupo de trabajo, y que dicho informe se difunda públicamente y esté disponible para la Iglesia Episcopal en línea a más tardar a principios de 2021. El informe se entregará a los siguientes miembros y organizaciones de la Iglesia Episcopal Protestante en los Estados Unidos de América: La Cámara de Obispos, El Consejo Ejecutivo, La Asociación Nacional de Escuelas Episcopales; todos los Seminarios Episcopales (incluyendo los programas diocesanos de formación para la ordenación); los Campamentos Episcopales y Centros de Conferencias; todos los Canónigos al Ordinario; todos los Oficiales de Transición; y cualquier otro organismo, organización o comité que el Presidente de la Cámara de Diputados o el Obispo Presidente consideren necesario. Se solicita a estas personas y organizaciones que informen al Grupo de Trabajo a más tardar el 30 de abril de 2021 con las siguientes respuestas escritas al informe, una copia de las mismas compartida con el Obispo Presidente y el Presidente de la Cámara de Diputados:
1) Cómo su organismo y/o institución ha contribuido a una cultura eclesiástica de discriminación, acoso y violencia de género contra las mujeres y las niñas en todas sus formas, detallando, cuando corresponda, ejemplos específicos de esta cultura que ha aprobado este comportamiento, ignorado y/o excusado este comportamiento, y cómo esta cultura ha dañado al organismo y/o a la institución; 2) El plan de acción del organismo y/o de la institución dentro de su organismo o institución que puede traer una cultura de la verdad, arrepentimiento, reconciliación y justicia en nuestra iglesia; 3) Y cualquier otra cuestión que el grupo de trabajo, en consulta con la Obispa Presidenta y el Presidente de la Cámara de Diputados, considere útil y necesaria para que la Iglesia en general confiese la verdad del impacto del pecado de la discriminación, el acoso y la violencia de género contra las mujeres y las niñas en todas sus formas, y para que inicie el proceso de restauración y reconciliación; y se resuelva además
Resuélvase que el grupo de trabajo revise estas respuestas y las envíe a la junta, comité y/o grupo de trabajo apropiados para que puedan ser evaluadas y utilizadas a medida que la Iglesia general avanza hacia la restauración y la reconciliación con Cristo y entre sí sobre nuestros pecados de discriminación, acoso y violencia por razón de género; y sea además
Resuélvase, que la Convención General solicite que el Comité Permanente Conjunto de Programa, Presupuesto y Finanzas considere una asignación presupuestaria de $40,000 para la implementación de esta resolución, incluyendo dos reuniones presenciales del grupo de trabajo, los costos asociados con la creación y difusión de la encuesta y el informe subsiguiente.
Explicación
El relato de la verdad del movimiento #metoo de mujeres, niñas, así como de hombres, que han sido víctimas de discriminación, acoso y violencia de género nos enfrenta a una verdad que particularmente las mujeres han estado diciendo durante siglos, pero que ha sido ignorada. Esta verdad no puede seguir siendo ignorada, particularmente en la Iglesia. Como Cuerpo de Cristo en el mundo, estamos llamados de manera particular a modelar el mandato evangélico de confesión y reconciliación. Esta Resolución inicia este proceso, invitándonos a ser valientes en nuestra forma de decir la verdad. La Iglesia Episcopal aún no conoce toda la verdad de la experiencia de la discriminación, el acoso y la violencia de género infligida a su clero y a los laicos por quienes están en el poder y por los sistemas de la Iglesia que no respetan la dignidad de todo ser humano. Otras denominaciones han modelado este trabajo para nosotros. En 2017, la Iglesia Metodista Unida encuestó a 4300 líderes laicos y del clero sobre la mala conducta sexual. Los resultados de esa encuesta indicaron que el 64% de los clérigos y el 31% de los laicos habían experimentado mala conducta sexual en la iglesia, desde agresiones hasta comentarios inapropiados o tocamientos y acercamientos incómodos. Proponemos adaptar esa encuesta al contexto episcopal para que podamos comenzar el proceso de compartir la verdad de la discriminación, el acoso y la violencia de género en nuestra iglesia, para que podamos ser guiados por Cristo en el trabajo de reconciliación y justicia.