A182 Disciplina de los sacerdotes y diáconos a nivel provincial o eclesiástico
Muchas diócesis tienen dificultades para llevar a cabo los procedimientos del Título IV, especialmente si un asunto se remite a la Conciliación, a los procedimientos del Panel de Conferencia o a los procedimientos del Panel de Audiencia. En casi todos los casos, las personas involucradas, como el Presidente de la Junta Disciplinaria, los miembros de los Paneles y los Abogados de la Iglesia, están manejando un asunto del Título IV por primera vez. Los errores de procedimiento son comunes. El coste para una diócesis puede ser considerable y, a veces, prohibitivo. Es difícil para algunas diócesis reclutar y formar adecuadamente o tener disponibles cuando se necesitan todas las personas necesarias para llevar a cabo un procedimiento del Título IV. Contar con una base provincial, eclesiástica o de otro tipo para las estructuras disciplinarias de la Iglesia garantizaría mejor que todas las personas que llevan a cabo los distintos aspectos de un procedimiento del Título IV reciban la formación adecuada y que la experiencia se adquiera y comparta dentro y entre esas personas y puestos a lo largo del tiempo. Un sistema provincial, eclesiástico o de otro tipo reduciría entre 90 y 100 veces el número de personas necesarias en toda la Iglesia para cubrir todos los puestos necesarios para que cada diócesis tenga un sistema de Título IV plenamente operativo. También se ha informado de que los resultados de faltas muy similares pueden variar mucho, dependiendo de la diócesis en cuestión, y que algún tipo de coherencia en los resultados sería una ventaja de un sistema provincial, eclesiástico o de otro tipo.
Explicación
Muchas diócesis tienen dificultades para llevar a cabo los procedimientos del Título IV, especialmente si un asunto se remite a la Conciliación, a los procedimientos del Panel de Conferencia o a los procedimientos del Panel de Audiencia. En casi todos los casos, las personas involucradas, como el Presidente de la Junta Disciplinaria, los miembros de los Paneles y los Abogados de la Iglesia, están manejando un asunto del Título IV por primera vez. Los errores de procedimiento son comunes. El coste para una diócesis puede ser considerable y, a veces, prohibitivo. Es difícil para algunas diócesis reclutar y formar adecuadamente o tener disponibles cuando se necesitan todas las personas necesarias para llevar a cabo un procedimiento del Título IV. Contar con una base provincial, eclesiástica o de otro tipo para las estructuras disciplinarias de la Iglesia garantizaría mejor que todas las personas que llevan a cabo los distintos aspectos de un procedimiento del Título IV reciban la formación adecuada y que la experiencia se adquiera y comparta dentro y entre esas personas y puestos a lo largo del tiempo. Un sistema provincial, eclesiástico o de otro tipo reduciría entre 90 y 100 veces el número de personas necesarias en toda la Iglesia para cubrir todos los puestos necesarios para que cada diócesis tenga un sistema de Título IV plenamente operativo. También se ha informado de que los resultados de faltas muy similares pueden variar mucho, dependiendo de la diócesis en cuestión, y que algún tipo de coherencia en los resultados sería una ventaja de un sistema provincial, eclesiástico o de otro tipo.