C020 Impuesto sobre el carbono
Se resuelve, con la aprobación de la Cámara de ________________,
Que la 79ª Convención General de la Iglesia Episcopal apoye un impuesto nacional sobre los combustibles fósiles basados en el carbono basado en la propuesta del Lobby Climático de los Ciudadanos, que impondría una tasa sobre el carbono a todos los combustibles fósiles y otros gases de efecto invernadero en el punto en el que entran por primera vez en la economía; alinearía las emisiones de EE.UU. con las limitaciones físicas identificadas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) para evitar el cambio climático irreversible; y utilizaría esta tasa sobre el carbono a través de un fondo fiduciario para hacer pagos mensuales iguales de dividendos por persona a todos los hogares estadounidenses.
Explicación
Como cristianos y miembros de una comunidad de fe, tenemos la responsabilidad de cuidar la tierra y los pueblos de la tierra: "Del Señor es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en él habitan"." El Salmo 24:1 La Convención General ha adoptado anteriormente resoluciones que instan a apoyar medidas que aprueben los esfuerzos para reducir el calentamiento global, incluyendo la Resolución GC2006-B002, "Reconocer y reducir el calentamiento global" Aunque las acciones locales, regionales y estatales son importantes y necesarias, no son suficientes para resolver este problema global que se está acelerando cada vez más. Estados Unidos debe tomar medidas significativas para participar plenamente en el esfuerzo internacional por preservar un mundo habitable. El Lobby Climático Ciudadano, organización no partidista y sin ánimo de lucro, ofrece una propuesta con base científica y con atractivo bipartidista. Esta solución climática, conocida como Tasa y Dividendo del Carbono, es un sistema nacional de tasa y dividendo del carbono (TCD), neutral en cuanto a ingresos, que pondría un precio predecible y en constante aumento al carbono, con todas las tasas recaudadas menos los costes administrativos devueltos a los hogares como un dividendo energético mensual. Los estudios demuestran que, en sólo 20 años, un sistema de este tipo podría reducir las emisiones de carbono en un 50% respecto a los niveles de 1990, al tiempo que añadiría 2,8 millones de puestos de trabajo a la economía estadounidense. Los beneficios de un impuesto sobre el carbono totalmente neutral en cuanto a ingresos son claros y están respaldados por líderes religiosos, asociaciones empresariales, líderes de seguridad nacional y líderes de la industria energética y sanitaria. Esta solución basada en el mercado salvará vidas, creará puestos de trabajo e impulsará nuestra economía al tiempo que reducirá los riesgos asociados al cambio climático.